Dicen (o más bien, digo) que los humanos son siempre humanos, los humanos nunca cambian, los humanos sólo son humanos. Dicen que los humanos se equivocan, que los humanos son ciegos, llenos de egos y de miedos, de culpas, frustraciones, quejas y juicios. Y dicen que todos son iguales; Que los hombres son infieles, que las mujeres son manipuladoras, frías, e infieles. Que no tienen concepto de lealtad, honor, honestidad. Que los humanos, todos, mienten. Que no son capaces de ver que todo y todos somos parte del mismo universo, que cuando mienten, no le mienten a nadie, sólo van en contra del universo al que pertenecen. Solía pensar que eran los "simios" los que eran así, y que sólo algunos pocos humanos, seres humanos, tenían algo más, algo bueno en el corazón. Yo creía que había muchos humanos en la tierra, que sólo era cuestión de buscar. Pero un día salí a la calle, abrí los ojos y pude verlos transparentes. Todos, todos son humanos. Todos se equivocan, todos juzgan, todos critican, todos mienten.
Eso me deja pensando, en esta aparente absoluta soledad, llego a pensar que tal vez no estoy sola. Mi corazón me dice, me grita, que hay alguien que no miente, que hay alguien que tal vez no es humano, y que tal vez yo tampoco quiera ser humana. El problema entonces no es la soledad, sino el no saber cuándo se está solo. Me dicen que todos mienten, menos uno. Y me dicen que ese uno no eres tú. Yo no sé qué creer, mi corazón me dice que no, que no les crea a ellos, que huya de ellos y desaparezca. Me dicen que no debo quererte, pero la supuesta mentira no es la razón por la que se supone que no debo admitirte en el msn. Yo no debería estar escribiendo esto, no debería haber leido lo que escribiste, tal vez no debí porque me estoy haciendo daño, pero no me arrepiento porque sé que es ahora cuando debo decirte que jamás haría algo para lastimarte. Perdón si lo he hecho, me hiero a mi cuando digo que no quiero verte. ¿Recuerdas cuando te dije que tal vez te estaba cazando ese día en Coyoacán para robarte un riñón y venderlo en el mercado negro?, ¿Y cuando te pregunté si no eras tú quien me robaría un riñón? Yo sé que no, que jamás quisiste hacerme daño, que no estás jugando conmigo, que no me mientes. Eso es lo que me dice mi corazón, pero no es sólo a él a quien quiero/debo escuchar en estos momentos. ¿Qué tal si es mi corazón lo que viniste a robar y romper por accidente?, ¿Qué tal que es tu corazón el que está en juego? ¿Qué tal que los dos somos humanos?, y nos equivocamos y somos ciegos y juzgamos y mentimos sin saberlo? Perdóname, me hiero a mi misma cuando te digo que no quiero volver a verte.
Yo sé del hubiera. Y lo que sé de él lo aprendí a la mala, en situaciones como esta en la que me he sentido desnuda frente a desconocidos. Yo sé del hubiera mucho más de lo que me gustaría saver. Y mi consejo para ti, es que lo mates. Que no pienes es él, que no pienses que pudiera haber pasado otra cosa, que congeles ese pensamiento porque nunca trae nada bueno. Vive en el hoy como si no hubiera mañana ni ayer, porque si no no podrás seguir adelante, no dejes que sea yo quien te ate al pasado, no dejes que nadie nunca te ate al pasado. Nunca mires atrás, nunca te derrumbes, nunca hojées las letras del pasado ni recorras caminos que ya andaste. Nunca llores si no vale la pena, no te quedes quieto ni cuando no sepas a dónde caminar, no te duermas si no tienes sueño, nunca te derrumbes, nunca mires atrás. No pienes en mi y olvídame el día que para mi "saver" vuelva a escribirse con b grande. Olvidame antes porque tal vez sea yo quien no vuelva.
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