Me compré unos tenis morados, casi sin pensarlo. Ni siquiera volteé a verlos después de probármelos. He usado el mismo modelo, misma talla y mismo color desde hace más de 4 años. No lo había pensado antes, pero es impresionante la cantidad de cosas que no han/he cambiado desde hace más de 4 años, hay quien dice todavía paso fácilmente por una niña de 16. Me pregunto si mañana me arrepentiré de mis tenis morados. Los miro una y otra vez, y es como si esos pies no fueran míos. Tal vez porque no lo son. No son mis pies y últimamente me da la impresión de que nada de lo que tengo es en realidad mío. Ninguna parte de mi cuerpo es en realidad yo. La mujer que veo en el espejo, no soy yo. Y no lo es porque yo soy una niña.
Me pregunto si extrañaré mis tenis rojos mañana, si miraré hacia abajo al desprtar y querré volver a ser todo lo que fui. El problema entonces sería que no soy capaz de recordar exactamente quién fui, qué pensaba, en qué creía, qué creía ser, qué era.
Hoy me compré unos tenis morados, del mismo modelo y talla que los rojos que he usado desde hace más de 4 años. Y me estaba preguntando, ¿De quién son esos pies que caminan ahora por mi? ¿De quién es ahora la mente que maneja este cuerpo que creí mío?
Me pregunto si extrañaré mis tenis rojos mañana, si miraré hacia abajo al desprtar y querré volver a ser todo lo que fui. El problema entonces sería que no soy capaz de recordar exactamente quién fui, qué pensaba, en qué creía, qué creía ser, qué era.
Hoy me compré unos tenis morados, del mismo modelo y talla que los rojos que he usado desde hace más de 4 años. Y me estaba preguntando, ¿De quién son esos pies que caminan ahora por mi? ¿De quién es ahora la mente que maneja este cuerpo que creí mío?
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